Grafointeriorismo con Lorenzo Caprile
Inteligente, auténtico, perseverante, respetuoso y cercano. Así es este hombre que vive entregado a su pasión, que es la de crear el sueño que toda mujer tiene dentro: estar guapa en los momentos más importantes de su vida. He tenido el privilegio de viajar al fondo de la personalidad de uno de los modistas más brillantes del mundo, a través de su letra, cuyo estudio ha sido fascinante. Tanto, como él lo es. Grafointeriorismo con Lorenzo Caprile. Ven, que te lo cuento.
Una tarde estaba en la sección de libros de El Corte Inglés y escucho por megafonía que Lorenzo Caprile firma ejemplares de su libro «De qué hablamos cuando hablamos de estilo». Así, por casualidad, se produjo mi primer encuentro con Caprile. Durante la firma, Lorenzo toma un boceto que le regala una admiradora que había acudido para conocerlo y lo reproduce en menos de un minuto. Después, pide a su admiradora que le dedique el que ella había hecho y llevaba para regalárselo. «¿Yo? ¿Dedicártelo a tí??, ¡Pero si yo nos soy nadie, Lorenzo!» Él responde: «Tu eres una diseñadora que me ha regalado un boceto y por eso quiero tener tu dedicatoria». Así de sencillo es este hombre. Por dentro y por fuera.
Mi turno. Me dedica su libro. Le hablo de Grafointeriorismo. Me da su contacto y me recibe en su taller en cuanto tiene un hueco en la agenda y se comporta como si me conociera de siempre. Me permite pasearme por todo el taller, como si estuviera en mi casa. Y nos sentamos a escribir en su oficina, donde está con su equipo. Cuando llevas un rato charlando con ellos te sientes una más, en plena confianza, como si te conocieran de siempre. Tanto él como los demás se muestran tal cual son. Sencillos y acogedores. Así que vamos a la tarea.
Igual que Lorenzo dice que «la ropa es un patrón», la letra de una persona es el ‘patrón’ de su forma de ser. En su caso, su escritura discurre espontánea sobre el papel, que representa su entorno vital. Deja fluir sus ideas sin detenerse. Ágil hasta el final, donde plasma su firma, ocupando todo el espacio que tiene. Porque Lorenzo vive la vida intensamente y aprovecha todo su espacio vital. Siguiendo su máxima de «experimentar con los colores», de «apreciar el alma de los materiales». Ejercitándose, en el «placer de la búsqueda de lo bello».
Ya tenemos un primer rasgo de su manera de ser. Vital, vivaz e intenso. Sigamos.
La escritura de Lorenzo es simplificada, clara y legible completamente. Estamos ante un hombre con una inteligencia objetiva, fértil y proactiva, que fluye de forma armónica. Además, tiene las cosas claras y es franco en su proceder en todos los ámbitos. Va a la esencia de lo cotidiano. No se pierde en lo superfluo, ni se complica innecesariamente. Va a lo importante, dejando a un lado lo accesorio.
También vemos que las líneas de su escritura no interfieren unas con otras, y que mantiene el margen superior y el izquierdo de forma proporcionada. Es respetuoso y elegante en su proceder. Así que podemos aplicar a su personalidad su máxima, cuando dice que, «una persona elegante es una persona inteligente, que se acepta como es y que ha aprendido a vivir con sus defectos». Lorenzo se muestra ante los demás y ante sí mismo tal cual es. Con sus defectos y virtudes. Lo que ves, es lo que hay.
La escritura de Lorenzo es claramente inclinada a la derecha. Es una constante que se repite con cierto ritmo. Este rasgo nos confirma que es de naturaleza cordial y afectiva, dejando libertad al otro. Pero además, ese ritmo nos indica que es perseverante y determinado en su pensamiento y en su acción. Como él mismo dice, «el talento no se enseña. Dominar el oficio de la costura en busca de la belleza requiere constancia».
Además de constante, Lorenzo es reflexivo, pero sin obsesionarse. Se toma el tiempo justo para pensar, crear y ejecutar. Avanza sin prisa, pero sin pausa. Llega hasta el final de la meta propuesta con agilidad, sin distraerse del objetivo marcado. Y lo hace con los pies en la tierra. Encauza su imaginación a través de sus creaciones, pero siempre pegado al terreno. Este rasgo lo vemos en la dirección de las líneas de su escritura, que son bastante rectas, pero con un punto vibrante. Lorenzo es eminentemente práctico y realista, pero sin restar un ápice al sentimiento. La prueba está en cómo percibe su trabajo, «Lo mío no tiene nada que ver con el arte, lo que yo hago es trabajar con unos trapos»… con los que él saca lo mejor de cada mujer.
Sigamos. Lorenzo tiene una letra semiangulosa y vibrante. Combina curva y ángulo, pasando la emoción por el tamiz de la razón. Es decir, sabe decir que ‘no’ cuando hay que decirlo, pero sin perder las formas, y siempre, tras haber razonado pros y contras.
Saber decir que ‘no’ sin ofender no está reñido con defender las ideas de uno apasionadamente. Y Lorenzo, lo hace…¡Vaya que si lo hace! El rizo del apoyo pasional de sus ideas es una constante en toda su escritura.
¿Y qué nos dice su firma? Nos confirma todo lo que ya sabemos. Lorenzo es auténtico porque su letra y su firma son iguales. Aprovecha el tiempo y es perseverante. Fíjate bien cómo optimiza el espacio y cómo inclina su letra. En su entorno íntimo, todavía defiende sus ideas con mayor pasión… pero al mismo tiempo, es más precavido (fíjate en ese punto).
Su firma nos dice algo más de él. Lorenzo se tiene en buena consideración (el tamaño de la firma es mayor que el del resto de la escritura y se subraya). Está satisfecho de lo conseguido y le gusta que se lo reconozcan. ¡Lógico! ¡Cómo no estar orgulloso de los logros conseguidos! Su inteligencia y su tesón, aplicados de forma práctica y constante a su imaginación, son las claves de su éxito.
Lorenzo dice que «hay que expresar la personalidad a través del estilo y que éste, es un objetivo a largo plazo y sin fecha de caducidad. Porque la personalidad se expresa a través del estilo»… y se da a conocer a través de la letra, sin trampa, ni cartón. Como es Lorenzo Caprile. Un modista que se descubre sin miedo a través de su escritura y que refleja el talento de un hombre inteligente y perseverante que sabe realzar la belleza de cualquier mujer que se ponga en sus manos. Porque «la elegancia consiste en conocerse». Totalmente de acuerdo.
Al marcharme de su taller pienso que conocer la personalidad de Lorenzo Caprile ha sido una experiencia extraordinariamente interesante. Porque él lo es. Me siento afortunada de haber podido admirar toda la belleza que sale de sus manos. ¡Gracias!
Aquí os dejo el estudio de personalidad de Lorenzo Caprile.