Grafointeriorismo con Antonio Bonet: silla ‘mariposa’ y curvas
Antonio Bonet decía que para él la arquitectura le permitía estar más cerca del hombre y de las formas. Un arquitecto catalán que supo trabajar en la vanguardia del movimiento racionalista, sin perder el equilibrio con la curva y las formas suaves pero contundentes. Así se observa en su letra, que hemos analizado con nuestro proceso de Grafointeriorismo. hemos descubierto a un hombre sencillo, generoso, meticuloso y muy receptivo al mundo interior y exterior. Grafointeriorismo con Antonio Bonet: silla ‘mariposa’ y curvas.
Antonio Bonet tiene una letra curva y extendida, que demuestra su apertura al mundo.
Nuestro protagonista tiene en su haber más de 200 obras, pero sin duda, el gran público lo conoce por ser uno de los diseñadores de la ‘silla mariposa’, también conocida ‘silla butterfly’. Entendió que la arquitectura ayudaba a ordenar la vida del hombre. Este concepto lo aplicó a todo lo que inventó: edificios y muebles, pasando por el planteamiento de una ciudad. le encantaba investigar con nuevos materiales y formas. Como podemos ver a través de su letra, Antonio Bonet era un hombre sencillo, auténtico, abierto a nuevas tendencias u agradable en su trato.
Antonio Bonet era un hombre auténtico que se mostraba tal cual en público y en privado.
Su letra es simplificada al máximo, rápida, firme, bien presionada y esencial. Estamos ante un hombre de ideas claras, que va a la esencia de las cosas y que, como vemos en su firma, no necesita apoyatura ninguna- rúbrica- ello demuestra su madurez y su seguridad.
Antonio Bonet era un hombre muy meticuloso y concienzudo.
Observamos que tiene una letra más bien pequeña, a veces no supera casi el milímetro. Antonio Bonet era un hombre muy meticuloso, hasta tal punto, que su hija Victoria asegura que si por él fuera, muchas obras no se hubieran terminado nunca. Incluso la mayúscula o inicial de su nombre no es muy grande. Un rasgo más de su sencillez y madurez.
La letra de Antonio Bonet demuestra un gran equilibro entre realidad e imaginación.
La dirección de las líneas de la escritura de Antonio Bonet demuestra el equilibrio entre realidad e imaginación. Sigue las líneas más bien rectas, pero se despega lo suficiente como para demostrar la vitalidad y la fuerza que caracterizó toda su obra.
Antonio Bonet tiene el ‘rizo’ del apoyo pasional a sus ideas.
Como todas las personas que tienen capacidad de inventar nuevas formas, como es el caso de Antonio Bonet, se aprecia en su letra el ‘rizo’ del apoyo pasional a sus ideas. la barra de la letra ‘t’ cubre prácticamente la segunda mitad de su nombre. Su rectitud también nos dice algo, su afán protector. Y también vemos que sabía defenderse con genio. Se aprecia en su rasgo acerado.
Antonio Bonet se basó en el acero y el cuero argentino para diseñar la silla ‘mariposa’.
También podemos observar que su espíritu amable pero firme se reproduce en sus obras más emblemáticas. La silla ‘butterfly’ o silla ‘mariposa’ es una combinación de acero y cuero. material frío y cálido. Todo muy equilibrado y ergonómico, como se aprecia la secuencia de su letra.
La silla ‘mariposa’ se basa en una sucesión de curvas, las mismas que se aprecian en su letra.
Antonio Bonet creó algunos edificios muy conocidos como el Tribunal Constitucional de Madrid o ‘La Ricarda’… pura curva.
Antonio Bonet se basó en las curvas de su letra para idear algunas de sus obras más emblemáticas.
La silla ‘butterfly’ o silla ‘mariposa’ tiene su precedente en la silla ‘Tripolina’, creada a mediados del siglo XIX por el ejército inglés.
La silla Tripolina fue un básico para el ejército inglés en el siglo XIX.
La silla ‘butterfly’ o silla ‘mariposa es un clásico del diseño industrial que combina en cualquier ambiente y le da un punto vintage a la vez que moderno a cualquier rincón.
Diferentes ambientes con la silla ‘mariposa’ o ‘butterfly’.
